A Marcelo esto no le hace ninguna gracia y su padre y él llegan a un acuerdo: en verano entrará como becario en el bufette de su padre a modo de entrenamiento y a cambio al acabar el mismo, será Marcelo el que pueda decidir dónde hace el último curso del instituto. Pero esto no sale ni como esperaba Marcelo ni como quería su padre... y hasta aquí puedo leer sin destripar el libro.
El síndrome de Asperger es una modalidad leve de autismo que hasta hace poco ni siquiera se consideraba así. Simplificando, se caracteriza por la incapacidad de interpretar ni expresar emociones, y tienen muchos problemas a la hora de entender la llamada "comunicación indirecta" (gestos, expresiones con significado ambiguo, ironía). Dentro del Asperger también hay casos más cercanos al autismo puro y otros casi "normales".
El libro está narrado en primera persona por Marcelo, lo que lo hace realmente peculiar. Pero no original. De hecho, las comparaciones con "El curioso incidente del perro a medianoche", de Mark Haddon, son inevitables. Yo creo que recomendaría antes el de Haddon que el de Stork, aunque no sé si lo hago por la novedad que en su día fue el otro para mí. El de Haddon es mucho más divertido, eso sí..
Si el libro tiene algún problema, es el narrador. El Marcelo narrador parece entender mucho más, se expresa mucho más claramente, interpreta mucho mejor los hechos que el Marcelo protagonista. Pero que conste que a pesar de esa crítica este libro me ha gustado mucho, sólo hay que aceptar las licencias del narrador como licencias literarias. No ayudan a la credibilidad del narrador pero sí al libro y a la historia. Y el libro es tierno, bonito, emotivo y su protagonista se te hace simpático desde la primera página.
El síndrome de Asperger este se ha puesto de moda en libros y televisión, no sé si es que es de reciente descubrimiento o qué. Jerry Spenson en Boston Legal, Temperance Brennan en Bones... cuanto Asperger.
ResponderEliminarEl libro a todo esto tiene buena pinta.
Marcelo me pareció un personaje fabuloso, que me hace recordar a algún alumno, sus formas de relacionarse, la dificultad para entender dobles sentidos... Los que trabajamos en esto observamos que hay épocas en los que te aparecen más unos trastornos que otros. Hace unos años eran TDAH (Trastorno por déficit de atención con Hiperactividad), ahora son Asperger, Autistas.... Lo importante es trabajarlos bien y encontrar buenos profesionales y ayudar muchísimo a los padres.
ResponderEliminarMarcelo me pareció un personaje fabuloso, que me hace recordar a algún alumno, sus formas de relacionarse, la dificultad para entender dobles sentidos... Los que trabajamos en esto observamos que hay épocas en los que te aparecen más unos trastornos que otros. Hace unos años eran TDAH (Trastorno por déficit de atención con Hiperactividad), ahora son Asperger, Autistas.... Lo importante es trabajarlos bien y encontrar buenos profesionales y ayudar muchísimo a los padres.
ResponderEliminarMucho debate hay sobre si se ha dicho explícitamente en la serie que Sheldon (The big bang theory) lo tenga.
ResponderEliminarAñado un comentario pa la colección del recomendador Morera. ;)
ResponderEliminarSegún me hizo saber unamiga que curró cuidando niños autistas (entendida en el tema, faltaría), todos tenemos un puntito de autismo en mayor o menor grado, más o menos desarrollado, de un tipo u otro... ya mentendéis (supongo y espero, que tan mal no voy a estas horas).
Digamos que sería como con los zurdos, que son minoría, pero aquí cualquiera con dos manos sabe usar la suya menos hábil aunque sea un mínimo.
Bah, reconózcolo, tan mal quizás sí voy.
Sólo dejo caer el dato ése y me retiro alegremente.
Saludos, señor Constan (y Chalaos varios).
JLin, la verdad es que da mucho juego. Lo de ponerse de moda será porque no hace demasiados años que se reconoció oficialmente.
ResponderEliminarJLina, sí es un buen personaje, muy entrañable.
key, la verdad es que no he visto nada de esa serie salvo algún gag suelto. Me han hablado mucho. Como he comentado, lo que hasta hace poco era "el raro" ahora es un Asperger. En una serie como esa es imprescindibles. También se dice que Grissom, el de CSI, lo es.
Brote, me lo guardo a la colección. Estoy de acuerdo, es como lo del trastorno obsesivo-compulsivo ese. Todos tenemos nuestras manías, sea con el orden de los CD's, que los cuadros estén rectos, la ubicación del cepillo de dientes y cosas de esas. Y todas "colarían" dentro de la definición de ese trastorno.
Como echo de menos el poder dedicarme a las lecturas que tengo pendientes y que verdaderamente me gustan... pero los profesores de Lengua y Literatura e Inglés se empeñan últimamente en meternos bodrios en forma de libros con cuchara y sin tragar...
ResponderEliminarA ver si estas vacaciones cojo algunos antes de volver a empezar otra vez...xD
¡Nos leemos!
Ah, pues yo ya me lo he apuntado, algo me dice que me va a gustar... Además, me encanta la portada del libro.
ResponderEliminarUn beso, natsnoC, que te echo muuuucho de menos... Corcho.
Pd.- Ya me he leído entero el blog de los Chalaos. Que lo sepas.
¿El blog entero? Espero que lo hayas hecho en dosis moderadas, que ese blog puede alterar los procesos cognitivos normales...
EliminarY este libro sí hay que leerlo, precioso.
Sí, el blog entero, y sí, en dosis moderadas, yo soy muy sensata :-)
EliminarY me lo he pasado genial leyéndolo, transmite además muy buenas vibraciones. Me hubiera encantado participar en vuestros comentarios pero, ya ves, entonces ni os conocía.
Este libro ya lo tengo bien apuntado.